Conociendo gente

 Hola queridos lectores

Hace ya un tiempo (no recuerdo cuánto), un chico me escribió con el “siempre me pareciste interesante y quisiera conocerte mejor, no te lo dije antes porque no quería incomodarte”. Sinceramente no lo esperaba y el interés que esa persona mantuvo durante años se esfumó en un par de días, he de confesar, no me esmeré lo suficiente como para que lo perdiera en un par de horas o en cuestión de minutos.

Entiendo que lo último puede interpretarse como algo muy… “payaso” de mi parte, pero es que tengo un problema con la situación: hay personas que confunden amabilidad con coqueteo. Y es que claro, si una persona es amable conmigo es porque le intereso.

Obviamente no, al menos yo creo que si una persona es amable con otra es por su educación o por su personalidad, no porque tenga una doble intensión y en algunos tiktoks hay quienes lo expresan con “tratar con decencia humana”.

Por alguna razón el tipo pensó que hace años, cuando convivíamos (era parte de mi trabajo) había un interés personal de mí hacia él y se montó una película donde había química y todo fluía y la pareja perfecta que se entiende sin palabras y bla bla bla. Yo, mi yo real no siguió el guion de su película y me gané un “creí que esto sería mejor” y no volvió a escribir.

Claro que mi “romance” fallido (entre comillas porque no hay manera que lo considere como tal) terminó ahí pero no las cosas que me dejó pensando (la situación, no la persona en sí)

Por un lado, pensar que las personas son amables sin una doble intensión puede parecer (para algunas personas) inocente de mi parte, pero me hace pensar ¿Qué tan mal está el mundo o qué tan mal han tratado a alguien para que crea que la única forma que puede ser tratado o tratada con amabilidad es por algún tipo de interés y no por educación?

Se dirá de broma, pero esas preguntas a veces no me dejan dormir.

Cuídense mucho queridos lectores, linda semana.

Desapariciones

 Hola queridos lectores

Como muchos de ustedes deben saber hace un par de días se confirmó la muerte de Debanhi Escobar en una situación con más preguntas que respuestas. Para mí las interrogantes van hacia las autoridades:

• ¿Cuál es su línea de investigación?
• ¿Porqué minimizan las situaciones de acoso?
• ¿Porqué insisten en tratar los casos de mujeres asesinadas como hechos aislados?
• ¿Qué se tiene que hacer para que las autoridades prevengan estas situaciones o para que implementen operativos de búsqueda eficaces?
• ¿Qué están haciendo para encontrar a las demás mujeres desaparecidas?

Varias de estas preguntas serían para el gobierno en general, tanto a nivel nacional como estatal y locales ya que, aunque las autoridades insistan en lo contrario, no se trata de hechos aislados sino de una problemática nacional. Sin embargo, en redes sociales se ven cuestionamientos hacia las amigas por dejarla sola, hacia los padres por permitirle ir a una fiesta y por no ir a recogerla, a la propia Debanhi por irse de la fiesta a esa hora y sola.

También están los comentarios de que a los hombres los matan más (en lo cual no profundizaré) o que el desear salir a la calle sin que nada le ocurra a nadie es una utopía o incluso quienes aseguran que es culpa de tal o cual partido político. 

Todos estos comentarios creo que se desvían del problema principal: el gobierno y autoridades (del partido que sea) no está haciendo su trabajo, no se busca a los verdaderos responsables ni se castiga de manera adecuada. En este caso se ha dado una explicación que ni la familia ni la población creen buscando cerrar un caso que se hizo mediático ¿Los casos que no son virales? Simplemente no se hace nada, como se evidenció al encontrar a varias mujeres más buscando a Debanhi, al confirmar la muerte de María Fernanda siendo que su padre había dado con la ubicación del responsable, al no buscar a Yolanda y dejar a su padre solo y así con un sin fin de nombres que ni siquiera conocemos.

Espero que tengan una buena semana, cuídense mucho.

Despedida

Hay veces que la vida nos obliga a cerrar ciclos, a despedir a seres queridos, humanos o animales, un tipo de ser vivo no le quita importancia o cariño a otro.

Muchas veces, las mascotas se vuelven parte de la familia y no el perro que se tiene en la azotea o el gato que deambula por el vecindario, sino quien acompaña en momentos de tristeza y alegría, de desvelos, de preocupaciones. Nadie se alegra más de la llegada de un miembro de la familia que los perritos que nos acompañan en el día a día, incluso cuando por circunstancias de vida como matrimonio/trabajo/escuela algún miembro de la familia tenga que mudarse, no hay mayor euforia con el regreso que la colita agitada de un perrito, ignoro la forma en la que otras mascotas expresen su alegría y su cariño, pero no dudo que lo hagan.

A pesar de todas las alegrías que nos dan, su compañía, las preocupaciones cuando enferman y demás, el tiempo que pasan con nosotros es poco, muy poco, sólo queda esperar que su partida sea sin dolor y de alguna manera, sepan que era alguien importante y amado.

Y de esa manera, continuar con la vida, con un dolor y una pérdida que quienes no sean petlover no siempre entienden, porque no “es un perro”, es alguien de la familia, a quien se le quiere, se le extrañará y se le recordará siempre.

Hasta siempre gordita