Cuetes

La semana pasada fue la fiesta patronal en la colonia vecina (hace unos años, pero en muchas colonias puede utilizarse “la semana pasada”) algo totalmente desapercibido por mí ya que no lo recordaba (o quizá no sabía), hasta que, el sábado y el domingo fui despertada a las 6 de la mañana con el sonido de unos cuetes tronadores, ¡¡¡¡6AM Señores!!!!! ¡¡¡¡En fin de semana!!!! Técnicamente no es de Dios, o sea, ¿Quieren que celebremos con ellos sus fiestas? ¿A las 6 am? ¿En fin de semana? Lo siento mucho, yo no puedo ya que en ese momento lo que deseo es dormir, además, como muchos de ustedes saben soy agnóstica, me agradan algunas festividades, algunas características de las festividades, pero eso de levantarse a las 6 de la mañana a prender cuetes como que no, si se quieren reunir para lo que sea que hagan muy bien, que avisen en la misa, que pongan letreritos pero que NO prendan cuetes para avisar a los fieles que la festividad ha empezado ya que despiertan (y molestan) a los demás, encima de todo.

Siguiendo nuestra serie de borradores hace algunos años me preocupaban los cuetes por dormilona, ahora menos me levanto a las 6 ni entre semana, pero mi preocupación está más por el lado de los niños con autismo, de las mascotas, de la contaminación que en algunos lugares está peor que en otros. Entiendo y sé que en algunos lugares el tronar cuetes es la forma de reunir a la gente, que aunque se les cite a una hora no llegan hasta que se truena algún cuete porque esos son los usos y costumbres del lugar, que la fiesta patronal no está buena si no hay un enorme castillo de fuegos artificiales o si faltan los toritos de pirotecnia, también entiendo que ese tipo de cosas son muchísimo más difíciles de erradicar que las bolsas de plástico pero también creo que poco a poco se puede ir logrando algo, el ir informando y educando a las nuevas generaciones será de mucha ayuda, el cambiar el pensamiento a una persona adulta resulta más complicado, sobre todo si hablamos de “prohibiciones” ya que por naturaleza tendemos a oponernos al cambio, pero también es posible con algo de paciencia y táctica.

Lindo fin queridos lectores =)